Hay un hombre –tildarlo apresuradamente de amigo, sería pecar de autobiográfico- que ha tomado la sabia resolución de entregarse a la aventura. Las dudas metafísicas, la búsqueda del paraíso siempre andan por sus ojos. Ciertas displicencias de la monotonía y de la cotidianeidad, pueden sofocar cualquier alma con algo de respiración; solo las almas puras transgreden esa repetición de los días. Un trabajo, un barrio y hasta un país deben ser pormenores de una vida y no clavos impertinentes. El hombre, hastiado de esos costumbrismos, se lanza al inmenso orbe.
Otras calles, otras esquinas, otras lunas, otros ríos, lo ajeno y lo diverso lo están esperando. Los días se vuelven distintos y únicos; algunos tendrán la forma de una ciudad apretada de montañas, otras la de unas ruinas de barro donde hombres veneraron dioses ajenos, otras de orilla de océanos desconocidos. Aprendizaje de culturas en todos los rincones, kilómetros de campo y de agua mansa. Nuestro amigo –ahora sí podemos llamarlo así- ha dejado de ser argentino para ser ese otro gentilicio tan mágico como misterioso: americano.
Hemos recibido sus mensajes (relatos descriptivos y de ensueños a la manera de Ortega y Gasset) y sus fotografías, y gracias a esas dádivas inolvidables pudimos creer, al menos un instante, que estábamos allí, y sentir la ilusoria presencia de esos descomedidos paisajes.
Nosotros, desde aquí, que adolecemos de una patria y envidiamos sanamente esa hermosa imprevisión errante, te enviamos un saludo hasta el punto americano en el que te encuentres.
Nosotros, desde aquí, que adolecemos de una patria y envidiamos sanamente esa hermosa imprevisión errante, te enviamos un saludo hasta el punto americano en el que te encuentres.
Fuente : Panoramica Del Observador, Jose Ignacio Alonso, nos reservamos los derechos.
Se me piantó un lagrimón junto con un nudo en el estomago que me dice "volvé"...
ResponderEliminarel dog
Te queriamos leer! Estimado y lejano amigo!
ResponderEliminarQue mejor forma que dedicarte unas palabras y expresarte, que de todas formas, aqui estas junto a nosotros.
Un gran abrazo